Otro mundo es posible, con Jesús



Hemos llegado a unos días muy especiales, al comienzo del nuevo año litúrgico con: el ADVIENTO, tiempo de la esperanza, de la espera en el amor de Jesús que viene de nuevo a sanar los corazones, a poner alegría en nuestros rostros, a colmar nuestra vida con su gran misericordia. Y como es un tiempo muy especial para nosotras y para toda la Iglesia hemos querido este año acogernos a la propuesta de este hermoso eslogan: Otro mundo es POSIBLE, con JESÚS. 

"El Advenimiento que esperamos los cristianos no es la Navidad... Ni tampoco es «el cielo»... ¡Es el Reino! «No es otro mundo... es este mismo mundo... ¡pero totalmente otro»! Se puede ser cristiano sin celebrar el adviento, ¡pero no sin preparar el Advenimiento!. Cada vez se perfila mejor: tenemos que crear OTRO MUNDO POSIBLE, sin imperios ni instituciones transnacionales o mundiales explotadoras de la tierra, nuestra Casa Común y de los pobres, lo que Jesús llamó Reino de Dios, pero dicho con palabras y hechos de este ya tercer milenio, ése es el Advenimiento que esperamos, el sueño que nos quita el sueño, lo que nos hace estar en «alerta». 

Y para poder vivir el Adviento y comprometer nuestra vida a este mundo posible con Jesús, estas 4 semanas tenemos 4 invitaciones especiales para reflexionar: "en estos cuatro domingos, seguiremos estos pasos: “Si cuidamos la Casa Común” (domingo 1º), “Si rescatamos a los excluidos” (domingo 2º), “Si percibimos la novedad, que hay que desvelar” (domingo 3º), “Si nos dejamos abrazar, para poder abrazar” (domingo 4º)". Y os invitamos a que caminemos juNtos estas cuatro semanas.

Esta primera semana el tema es: Si cuidamos la Casa común. "El mundo entero vive convulsionado por tantas circunstancias que nublan el horizonte, nos llenan de miedo y despiertan dudas y perplejidades sobre nuestro presente y nuestro futuro. Pero el Adviento, la promesa de que Dios está presente y llega en medio de nosotros, nos invita a perder el miedo y soñar que OTRO MUNDO ES POSIBLE. Los sueños nos invitan a no cruzarnos de brazos. Le venida del Señor nos urge a la esperanza y a la conversión de cuidar el Planeta."

¿Cómo estamos cuidando nuestro medio ambiente? ¿qué hacemos en nuestros hogares, comunidades, lugares de trabajo para tratar la contaminación?. No nos quedemos de brazos cruzados, oremos por nuestro mundo pero también pongámonos en marcha y comprometamos nuestra vida para lograr un mundo mejor.

"Que al celebrar el advenimiento de Jesús nos unamos a todas aquellas personas, de cualquier religión, movimiento social que trabajen por el Advenimiento del Nuevo Mundo."




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